-En tardes como aquella, lo único que podíamos hacer era hacer nada. Llovía demasiado como para jugar baseball y el Atari, después de tanto tiempo, ya no nos satisfacía; Eran apenas unos cuatro jueguitos básicos con unas paletas estúpidas de lado y lado, y la pelotita cuadrad que rebotaba torpemente dentro de la pantalla…. En tardes como esas, cuando los padres de Carlos no estaban en casa, metíamos el castte en de Betamax por enésima vez en el armatoste aquel, aunque ya nos sabíamos de memoria cada gemido de la rubia con sus tetotas y su acento Puertorriqueño que no paraba de decir “métemela toda, papito!!”…. De no ser por María Teresa, creo que una tarde de esas nos hubiésemos muerto de la ladilla.
-“Ya llegó!, ya llegó!, está abajo despidiéndose del novio!”, gritaba quien estuviera haciendo guardia en el balcón…. Apenas escuchábamos el alerta, nos lanzábaos escaleras abajo para alcanzarla antes que tomase el ascensor. Llevábamos nuestras patinetas, un pelota, los guantes, lo que fuese necesario para disfrazar esa cacería que le montábamos…. María Teresa tenía que sospechar algo ya, pues cada vez que entraba al edificio, allí estábamos todos: un grupo de carajitos con la pubertad que les reventaba los pantalones haciendo las veces de comité de bienvenida…. Yo sé que no éramos los únicos con ganas de montarnos con ella (en el ascensor, digo), porque todo el condominio estaba sacudido por la presencia entre nosotros de María Teresa Blühm, Miss Distrito Federal….
-Ella medía más de 2 metros. Por lo menos así nos parecía, ya que cuando nos apretujábamos en el ascensor para viajar con ella apenas si le llegábamos a la cintura…. Teníamos un estricto código de honor; Por eso nos turnábamos para que todos, sin excepción pudiésemos estar arrimaditos a ella…. Su cuerpo olía rico, usaba siempre ropa muy, pero muy apretadita, y cuando el quórum era total en la cabina del elevador, uno quedaba casi estampado contra esa Diosa oxigenada que siempre pegaba el culo contra la pared del fondo, porque María Teresa debía intuir que no era muy normal que todas las tardes nosotros nos antojáramos de subir hasta el piso 10, justo un nivel antes de que ella se bajara en el PH…. Nos moríamos de las ganas de estrellar la cara en esas nalgas, lo juro!.
-“Te imaginas que te diga así?”….”Métemela toda, Papito!!”, comentaba Carlos
-“Con eso que cargas entre las piernas no creo que le hagas ni rosquillitas…. Papito”, le respondía Andrés
-Luego del Sacudón hormonal, muy en vivo y en directo, regresábamos al Betamax y a la Portorra y su obsesión con el papito…. Carlos siempre era el primero en salir disparado al baño; A los 2 minutos, regresaba con la sonrisa triunfal de quien la ha lanzado a más de un metro de distancia…. Definitivamente, en las tardes como aquellas en las que no había nada qué hacer, el ocio era la mejor excusa para estimularse…. Cuando revisábamos las revistas porno que Gilberto le robaba a su papá, hacíamos sesiones de anatomía comparada entre aquellas voluptuosas mujeres y nuestro mujerón que llegaba, a golpe de 5, con ese olor que mi mamá decía era Pachulí, pero que a mi me olía a Gloria….
-“Seguro que tiene los pelos de la totona del mismo color de su cabello”, se imaginaba Carlos
-“Pendejo!, no ves que es teñido?, segurito que los tiene negros, como la china de la revista!”, le respondía Andrés
-“Para mí que es Cangrejera, y si te agarra te chupa!”, agregaba yo, imaginándome un remolino como el que hacía el desagüe de mi ducha
-“Qué es eso de Cangrejera?”, me preguntaba Gilberto, con su irremediable cara de pendejo
-El novio de María T. era el más indicado para saberlo. Era un tipo guapetón de cabello rubio, con un carro deportivo rojo, y según escuchaba en las conversas de las doñas, trabajaba como modelo…. El tipo nunca se bajaba del carro, y de solo pensar que era él quien se gozaba a nuestra Diosa de la misma manera en que el papito lo hacía con la portorra, nos moríamos de la envidia…. Una vez recuerdo que discutíamos sobre si era mejor meterle la pinga a nuestra Miss antes ó después de orinar, para así tenerla más dura…. Carlos dijo: “Yo no sé, pero yo se la mamo a ese tipo después de que acabe con ella…. Así por lo menos me quedará el gustico”…. A mí el comentario me dio dentera…. Andrés lo vió raro, y le preguntó si se estaba mariconeando….
-Pero hubo una tarde en la que María teresa llegó al edificio con la cara descompuesta, como si hubiese llorado mucho. Salió del carro rojo dando un portazo y no le dio su besito de despedida al novio; Nos impresionó tanto su rostro que no nos atrevimos a subir con ella al ascensor; Después de ese día, siempre llegaba en taxi y siempre triste, como si todo el tiempo estuviese pensando en algo, no lográbamos saber que le pasaba, y ni de vaina podíamos preguntarle…. Si nos subíamos con ella al ascensor, parecía no importarle; Ya no olía como antes, la verdad es que ya no olía a nada….
-Fue la doña de 2-A la que nos aclaró todo una tarde que estaba tendiendo ropa con la argentina del 8-B…. Escondidos detrás de una puerta que daba al solar pudimos escucharlas mientras comentaban:
-“…. y bueno, como la habían llamado ya varias veces diciéndole lo mismo, ella se decidió a ir a ver si era verdad, y MUERETE!, entra a la discoteca esa y encuentra al novio balando con otro hombre…. Carmencita me dijo que la niña se quería morir, porque incluso los vió besándose!.... Tú puedes creer la mala suerte de esa niña?, Qué desgracia!, tan bella y tan desdichada!.....
-Esa tarde, Carlos nos dijo que todos los modelos eran así…. Yo sencillamente pensé que Dios le da mocos a los que no tienen narices.
....“Piso 10, Por Favor”, extraído de “Lecturas Cortas para el Baño”, editado por Cómala.com, 2000; Libro que recopilaba las columnas de Elí en "Urbe".
martes, junio 20, 2006
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1 comentario:
te la estás comiendo con esto que estás haciendo en el blog men, se me parece a lo que hace este carajo: http://karwin.wordpress.com/2005/11/22/pin-pan-pun/#more-5
bien de pinga.
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